Weichán en el Pikunmapu | Carlos Danton Carvajal Barahona (Levilipi)

El tema de esta investigación, Weichán en el Pikunmapu, es un intento de develar hechos y saberes olvidados, tergiversados, o negados por la sociedad chilena y la historia oficial. La institución del Weichán, guerra, y la figura del Toki, jefe militar, ya no existen; el último de estos héroes en el Gulumapu fue José Santos Külapang que murió entre 1874 y 1875. Siglos antes, en el Pikunmapu, “tierra del norte” del Wallmapu que iba del río Limarí hasta el río Itata, sus habitantes autóctonos al verse en peligro se opusieron a los invasores incas y, de inmediato, continuaron su Weichán contra los invasores españoles. De esta manera forzada y violenta, los pu Pikunche y su territorio fueron sometidos para siempre. Desde aquel entonces, hasta hoy, los vencederos y, luego, la élite social y económica chilena que estos formaron y les reemplazaron, en un intento premeditado de borrar la memoria y el sentimiento de pueblo en los vencidos, instalaron el discurso de una falsa epopeya de grandeza que pone énfasis que, durante la ocupación del territorio pikunche, no hubo resitencia alguna; y que, salvo puntuales casos anécdóticos, se efectuó pacíficamente con beneplácito mutuo. El presente trabajo investigativo presenta, por tanto, un relato inverso a ese discurso winka; a través de la entrega de hechos olvidados y evidencias irrefutables se argumenta que -durante la invasión inca y española, entre la segunda mitad del siglo XV y la primera del siglo XVI- si hubo conflicto, y una feroz oposición. Y que, dentro de ese contexto, en defensa de su libertad y territorio ancestral, numerosas veces, los Pikunche hicieron correr la “flecha ensangrentada” convocando al Weichán.